¡Saludos, guerreros de Calradia!
Los castillos suelen construirse en lugares estratégicos y fáciles de defender, desde los que los señores puedan tener un control total de la población a su alrededor y desde donde puedan proteger sus tierras de todo posible invasor. Los gigantescos parapetos otorgan a los defensores puntos elevados desde los que hacer llover proyectiles sobre aquellos tan idiotas como para optar por un ataque directo, mientras que los gruesos muros ofrecen mucha protección a aquellos que están en su interior.
Pero los castillos no son invulnerables a los ataques. Tal y como ocurre con cualquier tipo de carrera armamentística, cada vez que se desarrolla un tipo de defensa se acaba concibiendo la forma de echarla abajo. En el blog de esta semana, echaremos un vistazo a algunas de las impresionantes herramientas bélicas históricas que se usaban para superar las defensas de un castillo. Del mismo modo, debatiremos sobre el papel que jugarán las armas de asedio en Mount & Blade II: Bannerlord.
Escalera de asedio
Las escaleras de asedio se convertían en la forma más sencilla de asaltar a un enemigo asediado: escalando. Obviamente, este ataque directo otorgaba una gran ventaja a las tropas que se defendían, ya que la parte superior de cada escalera se convertía en un cuello de botella. El propósito de este tipo de ataques no tenía por qué ser, necesariamente, superar a los defensores, sino capturar algún punto estratégico clave desde el que iniciar el ataque (como, por ejemplo, el control de las puertas).
En Bannerlord se usan de la misma manera. Las escaleras de asedio sirven para que las tropas escalen un muro, obliguen a las tropas defensoras a expandirse y aprovechen sus debilidades en defensa. Sin embargo, las unidades se quedan completamente expuestas al desplegar las escaleras y, en última instancia, corren el riesgo de que todo sea en vano si los defensores tiran las escaleras del muro.
Torre de asedio
Las torres de asedio funcionaban de manera similar a las escaleras de asedio, desde el punto de vista de que permitían a los atacantes encaramarse a un muro. Las torres de asedio, no obstante, tenían una ventaja clara sobre las escaleras: su diseño cerrado ofrecía un cierto nivel de protección a las tropas atacantes y permitía que un mayor número de guerreros pudiese asaltar el muro a la vez.
En Bannerlord, las torres de asedio tienen exactamente la misma función. Ofrecen protección a las tropas que avanzan hacia el muro antes de bajar un puente que permite a los atacantes cruzar hacia el muro. Sin embargo, los defensores pueden destruir las torres de asedio, de tal modo que los jugadores tendrán que deshacerse de toda arma de asedio defensiva antes de iniciar un ataque con una torre.
Ariete
Los arietes permitían a los ejércitos atacar el castillo de forma más directa. Funcionaba gracias a una mezcla de velocidad y fuerza bruta clásica. La idea era muy simple: ponerle una cabeza metálica a un tronco y usarlo para golpear repetidas veces una puerta o muro hasta que cediese.
En Bannerlord, los arietes son solo efectivos contra las puertas exteriores de un castillo. Y, al igual que las torres de asedio, se pueden destruir. Tienen un techo que los protege de los proyectiles ligeros que les caigan desde arriba, pero las armas de asedio defensivas pueden destruir esta cobertura y dejar expuestas a las tropas del interior.
Balista
La balista funcionaba como una especie de arco gigante. Usaba la torsión para lanzar una flecha o proyectil del tamaño de una lanza con tal velocidad que perforaría cualquier tipo de armadura y diezmaría a todos los desafortunados que se interpusiesen en su camino.
En Bannerlord, tanto los ejércitos al ataque o a la defensa durante un asedio tendrán acceso a balistas. Son un modo de que los atacantes se libren de las tropas defensivas antes de iniciar el asalto a gran escala, del mismo modo que también permiten desbloquear situaciones de atasco que se podrían producir durante el combate. Del mismo modo, las tropas en defensa podrán usar las balistas para reducir el número de enemigos que se aproximen, o bien para detener las armas de asedio del enemigo e impedir que lleguen a los muros. Las balistas también tienen una variante de proyectiles de fuego, que se tarda más en construir y tiene menos munición que el modelo básico, el cual es mucho más poderoso contra las armas de asedio del enemigo.
Mangana
Otro tipo de catapulta que se usaba en los asedios era la mangana. El principal objetivo de la mangana era crear una brecha en los muros del castillo lanzando grandes proyectiles desde un cubo situado en el extremo del brazo del arma. También se usaban para lanzar cadáveres y excrementos por encima de los muros, en un intento de expandir el miedo y enfermedades entre las tropas enemigas.
Tal y como ocurre con las balistas, tanto las tropas de ataque como las de defensa tendrán acceso a las manganas en Bannerlord. Los jugadores podrán construir una versión básica que podrán usar para atacar y destruir almenas durante los asedios, con lo que las tropas enemigas se quedarán expuestas. También hay una variante de fuego que inflige más daño a las armas de asedio del enemigo y que tiene daño de área de efecto contra las tropas.
Trabuquete
Posiblemente, los trabuquetes sean el tipo de arma de asedio más poderoso que se usaba en las guerras antiguas y medievales. Tenían un brazo que pivotaba para lanzar proyectiles a grandes distancias y gozaba de dos diseños: tracción (donde era la gente quien le otorgaba la energía) y contrapeso (en el que se usaba un peso en el lado corto del brazo).
En Bannerlord, verás cómo los ejércitos que están llevando a cabo el asedio usan el trabuquete de contrapeso. Se pueden usar para causar estragos entre las defensas desde una distancia relativamente segura, así como para destrozar almenas y coberturas con facilidad. Los trabuquetes también se pueden construir en una variante de fuego, la cual tiene un daño de área de efecto extremadamente eficaz contra las tropas del enemigo.
¿Y cómo se desarrollan los asedios en el juego? Al iniciar un asedio, el ejército rodea un castillo y corta el acceso del defensor a los suministros del mundo exterior. Los precios se disparan y los materiales empiezan a escasear hasta que, con el tiempo, los defensores se rinden por culpa del hambre. Esto, obviamente, lleva su tiempo, así que a los atacantes les sale mejor aprovechar la ventaja si tienen ocasión (no en vano, siguen teniendo que pagar los sueldos y los soldados también tienen que comer).
Suponiendo que el ejército al asedio no quiera matar de hambre a su rival, siempre puede construir armas de asedio para atacar (aunque tardarán su tiempo en ser construidas, según el tipo y el nivel de la misma). En cuanto se haya construido un arma, se podrá usar para bombardear el castillo en el mapa de la campaña o para iniciar un ataque en el mapa de combate. Si se ataca en el mapa de la campaña, se podrán crear brechas en los muros que facilitarán el ataque final, aunque esto supondrá tener muchas bajas en ambos bandos. Es por eso que los jugadores tienen que sopesar bien si les interesa abrir una brecha y pagar el coste de la misma (en términos de tiempo y soldados).
Los defensores también tienen un par de trucos en la manga. Pueden salir y hacer frente a los atacantes en cualquier momento, o bien esperar a que lleguen refuerzos que rompan el asedio. En el mapa de combate, tendrán una posición bien protegida que defender, con un suministro ilimitado de munición y agujeros desde los que lanzar proyectiles y barriles ardiendo a las tropas que estén debajo.
Al final, los asedios son opciones sangrientas y muy costosas para todos los involucrados. Son caóticos y violentos..., pero también muy divertidos.
Última edición por Sergivs5 el Vie Mar 30, 2018 10:39 pm, editado 3 veces (Razón : Taleworlds al fin ha publicado la traducción)