Aviso que mañana o pasado como tarde subiré la quinta parte, no me gusta dejar el asedio a la mitad, pero es necesario porque sino me quedaba demasiado largo. Aviso que la historia empieza a tener tintes un poco fuertes y bizarros. Espero que nadie se sienta ofendido, que esto no es más que una historieta y troleo sano. Que luego mucha gente no sabe diferenciar el humor de la realidad y se lo toma todo a pecho. Sentido del humor ante todo señores.
Nuestros peores temores se confirmaron: una infinita hueste de turcos infieles se congregó frente a las puertas de nuestra foraleza. Su número era tal que el suelo temblaba mientras se aproximaban, y un hedor a cuero y ternera de Kebab con salsa de yogur inundó el aire.
Terco nos congregó en el patio de armas y todos juntos cantamos “el novio de la muerte” como fieros caballeros legionarios del Tercio Viejo. Aunque nos encontrábamos faltos de entrenamiento, comida y equipo nos sobraban los COJ***S y la MALA HOSTIA. Allí, como fieros y galantes caballeros ibéricos defenderíamos a España (y a CaballerosdeCalradia of course) hasta la muerte, capitulando sólo después de muertos. El enemigo, sin embargo, nos decepcionó y en vez de buscar una noble y sangrienta confrontación engarbó la bandera blanca dispuesto a parlamentar. Recibimos al enemigo frente a las puertas, desarrapados y hambrientos, nuestro empaque y espíritu nietzscheciano era tan fuerte que nos hizo salir a plantar cara y marcar territorio con unos simples taparrabos, ideales para exhibir nuestros voluptuosos cuerpos y nuestros COJ***S de acero.
Tras ello, Hijodeleon intentó seguir encandilándonos con sus tocho-post, pero no contaba con que Terco se le adelantaría a sus artimañans. Y es que todo caballero galante ibérico es, además de un toro bravo y pendenciero de cuerpo voluminoso y tatuado, un ser con un ingenio y cultura envidiable. No en vano el gran maestro Quevedo era por igual un fiero y veterano guerrero de Lepanto a la par que un genio literario. Antes de que hijodeleon pudiera envenenar las mentes de nuestros hombres con promesas vacías, Terco se lanzó a por su oreja, la cual le arrancó de un bocado. Hicieron falta 12 hombres para separarlo, y es que no es de buena honra asesinar a un emisario con una ofrenda de paz por muy infiel que sea. Pero hay que entender que la furia de un guerrero hispano a veces es imposible de controlar y suele devenir en sangrientos y encabritados ataques de ira. Hijodeleon se retiró tras sus hombres llorando y maldiciendo mientras nuestro gran Terco escupía su oreja con asco, pues es bien sabido que la carne de un infiel es venenosa y se debe evitar su contacto con los humores del cuerpo (léase De curandi rationi, de Galeno).
Tras este infructuoso intento de parlamento, nos retiramos al interior de las murallas aguardando el asalto del enemigo. Los otomanos de Talesworlds empezaron a prepararse para el asedio, construyendo escalas y cargando la pólvora de los cañones, mientras nosotros fortalecíamos nuestra mazadura en el TEMPLO, curtíamos nuestras artes de combate con Muay Thai holandés y devorábamos filosofía alemana que nos ayudaría a afrontar nuestro destino. Fue en este contexto, con la certeza de una muerte segura, que Terco se comprometió a enseñarnos la última parte del entrenamiento de un macho alfa ibérico. Sabe Dios que en otras circunstancias habríamos requerido de años para llegar a esa fase, pero Terco quería que fuésemos a la tumba sintiéndonos unos verdaderos ALFAS. Así pues, comenzamos el último trecho de nuestro camino hacia la gloria espiritual de un Tercio Viejo.
La última parte de nuestra formación versaba sobre el antiguo y noble arte del ligoteo. Y es que todo buen ALFA que se precie debe dominar a la perfección el complejo y gratificante acto de tener a una buena moza comiendo de tu mano. Para ello uno se debe preparar a conciencia: una BUENA CAMISA de marca bien ceñida a nuestra MAZADURA TATUADA, exhibiendo buen RÓLEX en la muñeca, símbolo de ESTATUS y BUEN CASH. Añádele al conjunto unas GOLDEN-CADENACAS, una BARBA APRETADA, buenos mocasines y nuestra natural cara de vividor pendenciero CHULO-PUTAS. Todo ello deviene en una imagen imponente y atractiva para cualquier chorba dispuesta a que la empotren (en realidad todas están dispuestas a eso).
Tras preparar nuestra imagen de chulo-empotrador subimos prestos al BMW dispuestos a pasar nuestra última noche en este mundo saliendo de discotequeo sano por las calles de Castelnuovo. CAFÉ QUIJANO resonando a tope por las calles rumbo al antro de moda del momento, aparcando el coche al lado de la puerta, si es necesario subiéndose a la acera, pisando un vado u obligando a base de ostias a que otro beta pringado saque su coche del sitio para que tú lo puedas aparcar con todas las comodidades del mundo. Saltarse la cola para entrar al garito gracias a tu empaque bravucón y tus contactos con el puertas serbocroata al que conociste entrenado con los hieros o en el thai.
Un vez dentro comienza la segunda parte del ligoteo. Y es que no basta únicamente con nuestra presencia imponente de DANDY-camorrista-pendenciero-celtíbero, hace falta mostrar también nuestra vena de LATIN LOVER bien verraco-matador. Y es que es una pena ver a todos esos españolitos que se hacen pajas con el Imperio, la colonización de América y demás mitología cuando en la vida real son una mierda a los que cualquier dominican, colombiano, negrolo etc. se los come de una mirada. Típicos flipados que mucho España en la boca pero carecen de los COJ***S de un Hernán Cortés avanzando con 11 hombres por selvas inóspitas demostrando dónde están la poderosidad de los españoles pura sangre que no se achantan ni de la pu** que los parió. He ahí la importancia de perrear buenos culos entangados, conocer el trato con sudacas, bailar desde BACHATAS a cumbias pasando por buena SALSA. No es necesario saber bailar bien, eso es más propio de homosexuales, pero sí saber marcar buena apariencia, “hacer como que sabes” para que nos entendamos. Un buen meneo de caderas llevando más o menos el paso durante el tiempo suficiente como para arrimar buena cebolleta a la primera presa que satisfaga tus expectativas. Las golfillas empezarán a mojar bragas restregando sus voluptuosas nalgotas contra ti antes de que te des cuenta.
Entonces llega la parte psicológica. Debes entrarle a la tía exhibiendo tus buenos adornos (rolex y Golden-cadenacas MANDAN), contando entre copazo y copazo lo bien que te va la vida y el trabajo, lo triunfador que eres, tu sueldo mensual (bruto, no neto) y realizar alguna muestra de virilidad intimidando a algún betilla que haya cerca. En definitiva, exhibir tus dotes de DANDY-COMEDIANTE. Si detectas que algún pringado pretencioso entra en tu área de ligoteo lo sacas inmediatamente, ya sea marcando bien el territorio con la mirada o liándote a ostias si hace falta. Comerle la oreja bien a la tía hasta que empiece a dar muestras de deseo (una sonrisita por aquí, jijiji por allá, restregarse la lengua por los labios) y entonces llega el momento de romper la distancia física. En realidad ya la habíamos roto anteriormente durante nuestro bailoteo, pero ahora hay que exagerarlo: sobadita de culo por aquí, manoseo por allá y finalizar con una buena comida de boca. Aquí ya la tía está caliente como un cañón de Flandes después de ejecutar una salva, sin terminar de creerse la suerte que tiene de haber pescado un hombretón así.
Una vez que habéis salido de la discoteca rumbo a su piso de estudiante debes cumplir como un buen semental pura sangre. Empotrar como un toro salvaje desenfrenado mientras la tía chilla de placer y grita tu nombre. Debes tener mucho cuidado de no pasarte y hacerles ningún tipo de daño, pero sí que debes llevar tú el ritmo de la acción y debes hacerlo con fuerza y frenesí suficientes para que la tía no se aburra y empiece a pensar que eres un beta que no sabe ni cómo satisfacerla. Preliminares y lamida de conejo MANDAN.
Y es en este momento cuando hay que ser muy cuidadoso. Después del/os polvete/s sano/s la mujer intentará atarte a ella emocionalmente. Y hablo por experiencia. Desgraciadamente, yo no tenía por aquél entonces la determinación y bravura de nuestro gran Terco. Yo era de los betillas que pensaban que tras un rostro angelical existe un alma tanto o más pura que su aspecto físico. Las mujeres se valen entonces de sus armas más poderosas (ternura, belleza, buenas perolas…) para convertirte en un plancha-bragas servil que le sirva de sustento mientras ella se beneficia al siguiente macho alfa empotrador cuando no estés en casa. Es en ese momento en que empiezan a dar el coñazo cuando hay que darles puerta y sustituirlas por otras mozas sedientas de macho. Yo desgraciadamente caí en lo que Santo Tomás de Aquino definía como una de las peores enfermedades del alma, el mal llamado amor. Cuando te quieres dar cuenta, la otra te aparece con un bombo y te quedas atado en casa pagando caprichos y cambiando pañales.
Por suerte el gran Terco me enseñó que un hombre debe vivir por y para sí mismo: para engrandecer su egolatría y dominar más la vida. Muay thai holandés, hierros, trabajo, viajes, filosofía, broncas y tener vaginas cerca como descanso al GUERRERO. Se puede tener también hijos por el mundo pasando pensión a la pu** que los parió pero sin ver cohibida la libertad. Cuando ésta y tu dinero + energías están supeditadas a una mujer dejas de ser un TORO bravo hijo de pu** empotrador para ser un mierdas dominado. Y todo por un sexo (medio de dominación que tiene la mujer sobre el hombre) regular que bien puedes tener siendo un buen dandy comediante. Pasar pensión hasta que el niño cumpla los 15 años, edad en la cual ya sirve como recluta en el Tercio y entonces debes enseñarle bien a cómo ser un buen macho alfa ibérico descendiente de El Cid, y por lo demás despreocuparte de tener ningún otro trato con la hembra.
Tras completar todo nuestro entrenamiento volvimos a las murallas de la ciudad a tiempo, pues el enemigo se preparaba para el asalto.
Continuará…