por Shai Sáb Ene 04, 2014 12:15 pm
Si bien suelo llevar ejércitos de 300 buenos guerreros, ellos no son capaces de determinar una batalla sin su General, que debe soportar lo peor de la batalla (primera línea, caballero de élite y el primero en trepar escaleras y abrir asedios a fuerza de hachazos), no existe ejército de un sólo hombre en toda Calradia. No se puede estar en todos lados al mismo tiempo, y una división debe ser capaz de manejarse sola no importa lo que pase.
Sin embargo, sigo decantando por un punto medio entre las habilidades de grupo y las personales, tirando hacia el último punto; Un Rey no es nadie sin sus súbditos, y un soldado de a pie no va a poder soportar el fragor de una batalla en proporción de cinco a uno contra un buen ejército mixto de Caballeros, Sargentos y Ballesteros sin ser comandado por un buen General que sepa impartir órdenes y organizar una batalla cuando todo parece perdido.
No podemos organizar un asedio decente sin Artimenner, una campaña importante sin Alayen y Firentis como vasallos a nuestro lado, ni saquear Calradia con Baheshtur. No se puede frenar una carga de caballería sin Deshavi y Bunduk partiendo cabezas desde lejos si no hay quien frene las lanzas cuando la caballería impacta de lleno sobre nuestra infantería.
Por lo tanto, lo más importante sigue siendo una montura que nos permita estar en cualquier momento en cualquier parte (Caballo de Carreras Campeón), una buena armadura para resistir lo que se ponga enfrente y una buena lanza/hacha larga aunados a una buena estrategia y visión (PATHFINDING y SPOTTING para elegir el campo de batalla) que nos vuelva lo suficientemente versátiles como para no estar desarmados en ningún momento, sumados a buenas habilidades (Carisma, Entrenamiento, Manejo de prisioneros, Arco, Lanzamiento y todas las habilidades médicas (Gracias Jeremus!!!)) si debemos enfrentarnos a Ragnar, Graveth o Sanjar Khan con todas las posibilidades en contra.
Balanceen, amigos, y escuchen lo que les dice este viejo rey que extendió su reino desde las nieves de Rivacheg a las arenas de Durquba